Como equipo importante para reducir los riesgos de contaminación en entornos de salas blancas, una caja de transferencia bien diseñada y que cumpla con las normas de salas blancas no solo debe demostrar un rendimiento óptimo, sino también reflejar plenamente la atención a la comodidad del usuario y la gestión del mantenimiento diario, lo que puede ayudar a mejorar la eficiencia del trabajo, reducir los costes de mantenimiento y prolongar la vida útil del equipo.
(1). Facilidad de operación y mantenimiento
La caja de transferencia debe estar equipada con un panel de control sencillo e intuitivo, con una disposición lógica de los botones e indicadores luminosos claros, que permitan realizar rápidamente operaciones como apertura, bloqueo y control de luz UV, reduciendo el riesgo de errores. Su diseño interno con esquinas redondeadas y cavidad plana sin protuberancias facilita la limpieza. Equipada con amplias ventanas de observación transparentes e indicadores de estado, permite supervisar el estado de los elementos internos, mejorando la seguridad operativa y la eficiencia del trabajo.
(2). Tamaño y capacidad
El tamaño y la capacidad de la caja de transferencia deben configurarse adecuadamente según el escenario de uso real y las características de los artículos transferidos, para evitar desajustes de tamaño, inconvenientes de uso o riesgo de contaminación de la sala limpia.
(3). Tamaño del artículo de transferencia
El espacio interno de la caja de transferencia debe permitir el paso de materiales de gran tamaño para evitar colisiones u obstrucciones durante la instalación. Al diseñarla, se debe estimar el volumen del artículo y su embalaje, bandeja o contenedor según las necesidades reales, y reservar espacio suficiente. Si se requiere el transporte frecuente de equipos, aparatos o muestras de gran tamaño, se recomienda optar por modelos más grandes o personalizados para mayor versatilidad y seguridad de uso.
(4). Frecuencia de transmisión
La capacidad de la caja de transferencia debe seleccionarse en función de la frecuencia de uso. En escenarios de uso de alta frecuencia, es necesario contar con una alta eficiencia de transmisión y capacidad de carga. En estos casos, se pueden seleccionar modelos con mayor espacio interno. Si la caja de transferencia es demasiado pequeña, las conmutaciones frecuentes pueden provocar un mayor desgaste del equipo, lo que afecta su vida útil y la estabilidad operativa.
(5). Espacio de instalación
Las cajas de transferencia suelen estar empotradas en las paredes divisorias de las salas blancas. Antes de la instalación, se deben medir con precisión el grosor, la altura y los obstáculos circundantes de la pared para garantizar que el empotramiento no afecte a la estabilidad de la estructura ni a la facilidad de uso. Para garantizar un uso seguro y fluido, se debe reservar suficiente espacio y ángulos de apertura adecuados frente a la caja de transferencia para evitar aglomeraciones o posibles riesgos de seguridad.
Fecha de publicación: 30 de septiembre de 2025
