1. Los sistemas de salas blancas requieren especial atención al ahorro energético. Las salas blancas consumen mucha energía, por lo que es necesario implementar medidas de ahorro energético durante su diseño y construcción. En el diseño, se debe considerar la división de sistemas y áreas, el cálculo del volumen de suministro de aire, la determinación de la temperatura ambiente y la temperatura relativa, el nivel de limpieza y el número de renovaciones de aire, la proporción de aire fresco, el aislamiento de los conductos de aire y el impacto de la forma de la conexión en la producción de los conductos sobre la tasa de fugas de aire. La influencia del ángulo de conexión de las ramificaciones de la tubería principal en la resistencia al flujo de aire, la presencia de fugas en las conexiones de brida y la selección de unidades de aire acondicionado, ventiladores, enfriadoras y otros equipos están directamente relacionados con el consumo energético. Por lo tanto, es fundamental tener en cuenta todos estos detalles de las salas blancas.
2. El dispositivo de control automático garantiza un ajuste completo. Actualmente, algunos fabricantes utilizan métodos manuales para controlar el volumen y la presión del aire. Sin embargo, dado que las compuertas reguladoras para el control del volumen y la presión del aire se encuentran en el compartimento técnico, y los techos son de paneles sándwich flexibles, su ajuste se realiza principalmente durante la instalación y puesta en marcha. Posteriormente, en la mayoría de los casos, no se vuelven a ajustar y, de hecho, no es posible hacerlo. Para garantizar la producción y el funcionamiento normales de la sala blanca, se debe instalar un conjunto completo de dispositivos de control automático que permita realizar las siguientes funciones: control de la limpieza del aire, la temperatura y la humedad, la diferencia de presión, el ajuste de las compuertas de aire, la presencia de gas de alta pureza, la detección de la temperatura, la presión y el caudal de agua pura y agua de refrigeración circulante, así como el control de la pureza del gas y la calidad del agua pura, entre otras.
3. El conducto de aire debe ser económico y eficiente. En los sistemas centralizados o de salas blancas, es fundamental que el conducto sea económico y eficaz en el suministro de aire. Los requisitos económicos se reflejan en un precio bajo, una construcción sencilla, bajos costes operativos y una superficie interior lisa con baja resistencia. Los requisitos eficientes se refieren a una buena estanqueidad, ausencia de fugas de aire, ausencia de generación y acumulación de polvo, ausencia de contaminación, y que sea resistente al fuego, a la corrosión y a la humedad.
4. En las salas blancas deben instalarse teléfonos y sistemas de alarma contra incendios. Los teléfonos e intercomunicadores reducen el número de personas que transitan por la sala y, por lo tanto, la cantidad de polvo. Además, permiten la comunicación oportuna con el exterior en caso de incendio y facilitan la continuidad de las labores. Asimismo, la sala blanca debe estar equipada con un sistema de alarma contra incendios para evitar que el fuego sea detectado fácilmente desde el exterior y cause importantes pérdidas económicas.
Fecha de publicación: 20 de marzo de 2024
