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¿CÓMO SABER CUÁNDO HAY QUE REEMPLAZAR LOS FILTROS DE SU SALA BLANCA?

En un sistema de sala blanca, los filtros actúan como guardianes del aire. Al ser la etapa final del sistema de purificación, su rendimiento determina directamente el nivel de limpieza del aire y, en última instancia, afecta la calidad del producto y la estabilidad del proceso. Por lo tanto, la inspección, limpieza, mantenimiento y reemplazo oportunos de los filtros de la sala blanca son esenciales para garantizar un funcionamiento estable.

Sin embargo, muchos técnicos suelen hacer la misma pregunta: "¿Cuándo exactamente debemos reemplazar el filtro de la sala blanca?" No se preocupe, aquí hay cuatro señales claras de que es hora de cambiar sus filtros.

filtro HEPA
filtro de sala limpia

1. El material filtrante se torna negro en los lados de entrada y salida.

El material filtrante es el componente principal que captura el polvo y las partículas en suspensión. Normalmente, un material filtrante nuevo tiene un aspecto limpio y brillante (blanco o gris claro). Con el tiempo, los contaminantes se acumulan en su superficie.

Cuando observe que el material filtrante, tanto en la entrada como en la salida del filtro, se ha oscurecido notablemente o se ha vuelto negro, significa que ha alcanzado su límite de contaminación. En este punto, la eficacia de filtración disminuye significativamente y el filtro ya no puede bloquear eficazmente las impurezas del aire. Si no se reemplaza a tiempo, los contaminantes pueden entrar en la sala blanca y comprometer el ambiente controlado.

 

2. La limpieza de la sala blanca no cumple con los estándares o aparece presión negativa.

Cada sala blanca está diseñada para cumplir con una clase de limpieza específica (como ISO Clase 5, 6 o 7) según los requisitos de producción. Si los resultados de las pruebas muestran que la sala blanca ya no cumple con el nivel de limpieza requerido, o si se produce presión negativa (es decir, la presión del aire interna es menor que la externa), esto suele indicar una obstrucción o fallo del filtro.

Esto suele ocurrir cuando los prefiltros o filtros de eficiencia media se utilizan durante demasiado tiempo, lo que provoca una resistencia excesiva. La reducción del flujo de aire impide que el aire limpio entre correctamente en la sala, lo que da lugar a una limpieza deficiente y a una presión negativa. Si la limpieza de los filtros no restablece la resistencia normal, es necesario sustituirlos de inmediato para que la sala blanca recupere sus condiciones óptimas de funcionamiento.

3. Aparece polvo al tocar el lado de salida de aire del filtro.

Este es un método de inspección rápido y práctico para las revisiones rutinarias. Tras asegurarse de que no hay riesgo de sobretensión y de que el equipo está apagado, toque suavemente con la mano limpia el lado de salida del filtro.

Si nota una cantidad considerable de polvo en los dedos, significa que el filtro está saturado. El polvo que debería estar retenido ahora lo atraviesa o se acumula en la salida. Aunque el filtro no parezca sucio a simple vista, esto indica una falla y la unidad debe reemplazarse de inmediato para evitar que el polvo se disperse en la sala blanca.

 

4. La presión atmosférica en la habitación es menor que en las áreas adyacentes.

Las salas blancas están diseñadas para mantener una presión ligeramente superior a la de las zonas no limpias circundantes (como pasillos o zonas de amortiguación). Esta presión positiva impide la entrada de contaminantes externos.

Si la presión de la sala blanca es significativamente menor que la de los espacios adyacentes, y se han descartado fallos en el sistema de ventilación o fugas en las juntas de las puertas, la causa probable es una resistencia excesiva debida a filtros obstruidos. La reducción del flujo de aire provoca un suministro insuficiente de aire y una caída de la presión en la sala.

Si no se reemplazan los filtros a tiempo, se puede alterar el equilibrio de presión e incluso provocar contaminación cruzada, lo que compromete la seguridad del producto y la integridad del proceso.

 

Casos reales: Filtros de alto rendimiento en acción

Numerosas instalaciones en todo el mundo han reconocido la importancia de mantener sistemas de filtración de alta eficiencia. Por ejemplo,Recientemente se envió un nuevo lote de filtros HEPA a Singapur.para ayudar a las instalaciones locales de salas blancas a mejorar su rendimiento de purificación del aire y mantener los estándares de calidad del aire de clase ISO.

Similarmente,Se entregó un envío de filtros de aire para salas blancas a Letonia., brindando apoyo a las industrias de fabricación de precisión con soluciones confiables de filtración de aire.

Estos proyectos exitosos demuestran cómo el reemplazo regular de filtros y el uso de filtros HEPA de alta calidad pueden mejorar significativamente la estabilidad y la seguridad de las salas blancas a escala global.

Mantenimiento regular: Prevenga los problemas antes de que comiencen

El cambio de filtro nunca debe ser el último recurso, sino una medida de mantenimiento preventivo. Además de estar atento a las cuatro señales de advertencia mencionadas, lo mejor es programar pruebas profesionales (como pruebas de resistencia y limpieza) periódicamente.

En función de la vida útil del filtro y las condiciones reales de funcionamiento, elabore un plan de reemplazo para garantizar la fiabilidad a largo plazo. Al fin y al cabo, un filtro pequeño para salas blancas desempeña un papel fundamental en el mantenimiento de la calidad del aire y la consistencia del producto.

Al reemplazar los filtros con prontitud y realizar un mantenimiento regular, puede mantener sus “guardianes del aire” funcionando de manera eficiente y salvaguardar el rendimiento de la sala blanca y la calidad de la producción.


Fecha de publicación: 12 de noviembre de 2025