Cada vez más sectores se consideran parte de la industria de salas blancas, como por ejemplo el biofarmacéutico, los laboratorios, los semiconductores, los hospitales, la alimentación y bebidas, los dispositivos médicos, la cosmética, la fabricación de precisión, el moldeo por inyección, la impresión y el embalaje, los productos químicos de uso diario, los nuevos materiales y la energía, etc.
La mayoría de los talleres con salas blancas tienen estrictos requisitos de temperatura y humedad constantes, que no se limitan a la temperatura y humedad interiores, sino que también abarcan su rango de temperatura ambiente. Por lo tanto, debemos adaptar el sistema de la sala blanca en consecuencia. Ahora, centrémonos en seis aspectos clave de las salas blancas y veamos claramente sus diferencias.
